El traje de flamenca


Libros
Rosa Mª Martínez Moreno
Signatura Ediciones, 2009
Marcos Escánez Carrillo


Del flamenco se han realizado numerosos estudios antropológicos. Las costumbres, las actitudes, los movimientos demográficos, las influencias culturales… Pero siempre se ha abordado el tema de la indumentaria de una forma superficial, pintoresca o curiosa.


Rosa María Martínez elaboró su tesis doctoral sobre este tema y ahora lo presenta en un libro que publica Signatura Ediciones. Un trabajo de investigación bastante serio sobre lo que sin duda es una iconografía conocida en todo el mundo, y que tiene todos los elementos para poder denominarse “cultura”.

En el traje de flamenca se conjugan la estética, el hábito, el arte, la evolución, la innovación, y algo fundamental, el comercio. Eso es, ha creado desde siempre un tejido productivo y económico considerable, siempre asociado a fiestas y celebraciones, así como a la práctica de la música flamenca.

Con todos estos elementos, la cultura de la indumentaria flamenca tiene vida propia, y obedece a parámetros internos. La autora lo defiende fundamentalmente como un hecho social, y estructura su análisis atendiendo a varios aspectos:

- Técnicos: nos describe los procesos de producción y la interpretación de sus implicaciones económicas.

- Antropológicos: atendiendo a la realidad social andaluza que se ha desarrollado en las distintas épocas.

- Históricos : a través del seguimiento de la evolución del traje

- Estéticos y simbológicos : atendiendo al significado de las piezas que lo componen, e incluso su colocación; así como a comportamientos posturales.

Si bien es cierto que el traje de flamenca ha despertado simpatía, un sentimiento de asociación con lo andaluz, mucha literatura, así como su uso como reclamo turístico; también es cierto que el tratamiento siempre ha sido frívolo y superficial.

Tal es así que por ser un traje que evoluciona en el tiempo, nunca se ha considerado como traje folclórico o tradicional. Esta fenomenología es lo que lo diferencia del resto de los trajes tradicionales, pero también lo que hace posible su vivacidad, ser objetivo de un extraordinario despliegue imaginativo y pieza originaria de un proceso industrial y económico.

Un estudio como este, original y científico, era necesario y es oportuno para el análisis general de la identidad andaluza, ya que la vestimenta es una consecuencia directa de una forma colectiva de ser. Y Rosa María Moreno, por su trayectoria y formación tiene el perfil más adecuado para acometerlo.