Borracho de Arte
Cante.Antonio “El Turry”
Guitarra. Jesús de Rosario, Kilino Jiménez y Robert SvardPalmas. José Cortés “El Indio” Sergio “El Colorado” y Miguel Cheyenne
Coros. Sergio “El Colorao” José “El Pirata Víctor Carrasco Estrella Fernández y Macarena Fernández
Bajo eléctrico. Natanael Borja
Contrabajo. Joan Masana
Piano. José de Josele
Percusión. Miguel Cheyenne Ramón Porrina Lucky Losada Benjamín Santiago “El Moreno” Paco de Mode y Rafael Heredia
Artista invitado al cante. Ricardo de la Juana
2021 Antonio Gómez “El Turry”
Dep. Legal M- 4785. 2021
Autor.
Antonio Nieto del Viso
Este Cd. Contiene un poco de todo, auténtico en ciertos pasajes, y comercial en su expresión, con melismas parecidos en los cantaores de su generación. En este caso concreto, observamos demasiados instrumentos musicales que sobresalen por encima de la voz, lo que dificulta la comprensión de lo que quiere transmitir.
En los tres tipos de bulerías comprendidos en los cortes 1,5 y 11, nos dan una idea pormenorizada de lo que este cantaor es capaz de desarrollar: es decir,la autenticidad y la vanguardia sincronizada por los arreglos de palmeros y jaleos arropando estos cantes festeros.
En la soleá apolá, encontramos la emoción y el buen gusto sonoro implícito que nos dejó “Cobitos” el que aprendió de sus maestros trianeros. Los fandangos de Huelva, muy bien presentados los remata sobre la base alosnera del inolvidable Paco Toronjo.
Tiene la calificación de sobresaliente en la vidalita, que muy bien decorada con sus perfectos matices del artista sabe llevar a buen puerto con melodías inigualables. “Borracho de Arte”, el tema que titula a la obra, son unos tangos muy modernos en lo que en todo momento controla el compás que adorna con la colaboración de los instrumentos intervinientes adaptándolo a sus cadencias vocales muy atractivas.
La seguiriya, es bella de expresión, pero le falta pellizco, aunque demostrando que conoce este palo cuando remata por el estilo de Los Puertos. Destaca sobre todo en los cantes libre, en este caso la farruca, expresada con el arco melódico perfeccionado todos los tonos medios y altos. Sinembargo, pasa de puntillas en unas sevillanas de poco calado musical en lo que apreciamos poco que recordar.
Lo mejor de todo este recorrido es la media granaína, en la que el cantaor se siente a gusto dominando con seguridad todo el espectro de los tonos, tanto, que creo que estamos ante un buen intérprete de este genuino estilo. Termina con un martinete muy sentido en su desarrollo.
Estas son mis impresiones sobre este documento que merece todo nuestro respeto, el mismo que hago extensivo a todos los que contraen la enorme responsabilidad de entrar en un estudio de grabación para manifestar su arte.