Adiós Flamenco a Manuel Ríos


Opinión


Antonio Nieto Viso


Emocionado Adiós Flamenco a Manuel Ríos Ruíz


Antonio Nieto Viso


El día 3 de Octubre de 2018, se escribió la última página de la intensa biografía de nuestro querido amigo Manuel Ríos Ruíz. Su muerte, es una pérdida irreparable para el Arte Flamenco, ya que fue uno de los pioneros en dignificarlo con su noble pluma y la elocuencia de su palabra para darlo a conocer en toda su dimensión. Su legado imperecedero será una obra para consultar por parte de todos.

Con su marcha definitiva, Jerez de la frontera pierde a uno de los mejores embajadores que ha tenido en Madrid. Los flamencos y artistas de esta ciudad, que le vio nacer el año 1934 quedan huérfanos de su amistad y de sus consejos totalmente desinteresados. Su alma y su persona estuvieron en la capital de España, pero en ningún momento perdió la referencia con su terruño. Su acento andaluz fue su bandera y el orgullo de ser jerezano por los cuatro costados.

Tuvo la suerte de escuchar personalmente a los grandes del Cante como, la Niña de los Peines, o al mismísimo Niño Gloria. Aparte, de lo que aprendió directamente en la campiña jerezana con cantaores locales los verdaderos sonidos mientras trabajaba con muchos de ellos, una forma de conocer todos los secretos de este arte famoso en el mundo entero. Su prosa exquisita prestó una inestimable ayuda para todo tipo de públicos, las hemeroteca así lo atestiguan.

Quiero detenerme, para destacar lo más importante de Manuel Ríos, su sencillez. Ese fue uno de principales valores con los que se ganó el respeto de sus amigos a lo largo de toda la geografía española. Con su sencillez pudo captar los principios del cante jerezano, un semillero que nos sigue dando excelentes artista, aunque en poco tiempo hemos perdido a algunos de ellos.

Cuando recibí la triste noticia, un escalofrío indescriptible recorrió todo mi cuerpo. Inmediatamente, se puso en movimiento la moviola de la vida para recordar los buenos momentos pasados a su lado.

Conocí a Manolo en Radio Nacional de España en Madrid allá por los principios de los años ochenta del pasado siglo XX, cuando a través de las ondas dictaba con su elocuencia sobre el Arte Flamenco. Desde entonces, tuve la oportunidad de intercambiar con él las impresiones de lo vivido en los escenarios de Madrid, en los que siempre estaba acompañado por su querida esposa Tina, a la que desde aquí le enviamos un emocionado abrazo en estos difíciles momentos.

También sabemos que, gracias a sus buenos oficios con las casas discográficas muchos artistas grabaron en disco sus cantes, una de las maneras para darse a conocer a nivel general. De no haber sido por él, hubiéramos perdido testimonios artísticos de alto valor.

Su autoridad y sabiduría quedó acreditada en los más importantes jurados de Cante Flamenco, en los que aportó su estricto sentido de la justicia. Dictó innumerables conferencias en los más prestigiosos foros. Tuvo mucho que ver en la fundación de la Cátedra de Flamencología de Jerez. Escritor, poeta, y flamencólogo, labor esta última en la que reflejo su sapiencia, que podemos apreciar en las hemerotecas; sobre todo en el periódico ABC. Sus críticas fueron más bien consejos para el artista, solo los grandes escritores como él son capaces de escribir sin molestar a nadie.

Todos los seres humanos, somos mortales, pero nuestro querido amigo Manuel Ríos Ruíz estará para siempre con nosotros ocupando un sitio de honor en la historia del Arte Flamenco. Sus libros, sobre todo el Diccionario Enciclopédico del Flamenco, escrito en colaboración del también recordado erudito José Blas Vega, que fue publicado por la Editorial Cinterco en 1988, es una obra fundamental para todos los que nos dedicamos a conocer y estudiar este maravilloso mundo del Arte Flamenco.

Desde la más profunda emoción, siempre estaremos agradecidos de haber conocido a aquel gran hombre que fue Manuel Ríos Ruíz.