Como bien dice José María Castaño en el texto de presentación del disco, Juan Fajardo Moneo, Momo de Jerez, ha grabado su obra prima perpetuando el cante de los suyos. Es decir, de la familia de los Fajardo y sobre todo, de sus tíos Manuel, Juan y Luis Moneo. Tres artistas jerezanos que suenan distinto, a pesar de estar hechos con los mismos mimbres. Así, se acuerda de Juan el Torta abriendo con el primer corte, recordando sus personales y geniales cantes por bulerías, de su tío Manuel en la seguiriya y martinete, y de su tío Luis en la soleá.
En cualquier caso es un disco que sabe a poco, porque redunda en la bulería pero falta lo espectacular, por lo que sirve como testimonio y como declaración de principios de un cantaor muy de Jerez, porque canta como su gente, pero que tiene que dar más para quedar en la memoria de la gente. La pregunta en ese caso es dónde está lo artístico si tantos cantaores suenan igual.
Y abro con esto un debate interesante... Siempre asociamos lo flamenco con el arte, pero... ¿existe un flamenco que no es artístico?. Si muchos cantaores suenan igual... ¿podemos decir que hay arte en todos, ó el artista es sólo el creador?. Una vez estuve hablando horas con Enrique Morente sobre este tema, y terminamos en la convicción de que el creador es el artista, pero todo el poso que se crea detrás de eso hasta convertirse en una comunidad de cantaores que hacen todos lo mismo, entra en la denominación de "folclore".
¿Y usted qué piensa....?